Un vientecillo fresco hace perfecto este soleado día.
Ya hice mi oficio y en cuanto acabe de escribir aca me voy para el mercado a hacer la compra de la semana.
Mi hija me acaba de tomar esta foto en mi lucha contra el otro gigante (Ver aca)
Bueno, y acerca del titulo de esta publicación... Cuando hablo de "llantota" No me refiero precisamente a la que rodea mi cintura.
Resulta que hace algunos años me encontré cerquita de mi casa una enorme llanta. Seguro se le explotó a algun bus, o que se yo. La cosa es que alli estaba y no pude resistir la tentación de ponerme a saltar en ella con mis hijas alli en plena calle. Claro que eso sucedio en el tiempo en que mis hijas eran unas chiquillas que no se avergonzaban de mis ocurrencias, al contrario, las compartian con una sonrisa.
Pues me encantó la llanta y haciendo uso de mis fuerzototas, la levanté y me la traje rodando hasta el patio de mi casa. Me costó mucho por que es una llanta en verdad pesada, pero lo logré.
Nunca me he arrepentido de haberlo hecho pues a lo largo de estos años mis hijas la han usado para jugar de muchisimas cosas, aunque ahora ya casi no la usan, se que se divirtieron con esa llanta.
Y bueno, ahora que estoy en esto, un dia le decía a Dios que ademas de la hora de baile me parecia que ya era adecuado hacer algo mas, algo que me diera un poco de firmeza.
Y como dice en un salmo "Me has guiado segun tu consejo" mi amado Dios me enseñó algo muy bueno.
El sabe que no me gusta hacer ejercicios en publico y que las veces que fui al Gym fueron angustiosas y estresantes, mas que por los ejercicios, por el hecho de hacerlos rodeada de personas.
Así que me llevó derechito a mi llantota y me puso varias rutinas de ejercicios.
Muchos podrán decir que no funciona, pero yo siento perfectamente como trabajan mis músculos.
Y sí, seguramente no es como las maquinas de tortura... digo, aparatos del gimnacio, pero tampoco pretendo participar en un concurso de fisicoculturismo.
Siento que llena mis aspiraciones, y se que Dios está en esto, asi que seguiré con mi hora de baile y mi gimnacio personal en el que se pueden hacer muchas cosas, desde saltar y saltar hasta casi llorar del tormento que producen algunas repeticiones en mis brazos, piernas y abdomen.
Aca van unas fotos ilustrativas ;)
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